Blue Valentine

Sinopsis:
Después de convivir durante seis años y tener una hija, Dean y Cindy han decidido casarse, pero entonces su amor empieza a desmoronarse. Intentando salvar la relación, Dean propone ir a pasar la noche a un hotel temático, donde eligen la “habitación del futuro”. A partir del futuro, se narra la historia de la pareja desde el momento de su encuentro hasta la irremediable crisis de su matrimonio.

Crítica:
Blue Valentine es la perfecta antítesis del cine romántico. Sin saber muy bien por qué, todo deja de funcionar en el matrimonio de Dean (Ryan Gosling) y Cindy (Michelle Williams). La trama se va resolviendo en un halo de confusión en la que podemos ver a Dean, un chico que ha dejado de lado toda su vida y sueños por su familia, convirtiéndose en un paleto de pueblo con un trabajo mediocre con la única motivación de tener una vida tranquila junto a su mujer e hija, la cual no es ni suya, pero todo el mundo lo trata como si fuera el malo de la relación, incluso hasta peligroso. Cindy, al contrario, es tratada como la víctima, pero es ella la que parece haber dejado de querer a su marido, aún siendo este perfecto con ella, dejando las buenas maneras con él y tratándolo como a un ser despreciable. El film tiene una doble moral con la que juega muy bien, en la que para no volverte loco es mejor dejar las opiniones del estilo "el bueno y la mala" a un lado, aunque sea difícil, siendo mejor dejarse llevar por la historia de estas dos personas que no van a dejar indiferente a nadie. En resumen, narra perfectamente el nacimiento del amor y la corrosión de éste sin dar muchos motivos, pero dejando la sensación de haber visto algo tan natural como la vida misma. Ryan Gosling hace un papelazo, es otra de esas películas que él protagoniza y que están a un altísimo nivel.

Nota:
Perfecta