El mejor padre del mundo

Sinopsis:
Lance Clayton (Robin Williams) siempre ha soñado con ser un famoso y exitoso escritor, pero sólo ha conseguido ser profesor de instituto. Entonces Lance sufre a la vez la peor tragedia, y la mejor oportunidad de su vida; por fin tiene la posibilidad de la fama y la fortuna que siempre ha deseado, pero sólo lo conseguirá si puede vivir con que se sepa cómo la ha conseguido.

Crítica:
Una de esas gratas sorpresas que ofrecen mucho más de lo que a priori podríamos esperar, siendo un trabajo seguro de si mismo y consigue trasmitirlo perfectamente a sus espectadores. Me encanta ese humor negro con el que hablan de la estupidez, frialdad y falsa importancia con la que tratamos a la muerte hoy en día. Es un tema que han sabido tratar con inteligencia, sin ser demasiado críticos o polémicos. Tiene momentos dramáticos que parecen injustificados o muy recientes, pero todo tiene un por qué y en este caso me ha parecido muy bueno. En cuanto a comedia, el primer tercio es genial y el resto va a ratos pero de gran nivel. Daryl Sabara, el cual nunca me ha gustado, consiguió que me reconcilie con su carrera y Robin Williams, más serio de lo habitual, pero con su desparpajo y su calidad típica en él.

Nota:
Buena